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Validez: Todo el día
Si buscas el itinerario perfecto para tu viaje de seis días por Suiza, esta selección de 9 rutas te ayudará a planificar tu viaje. Te muestra varias opciones que se pueden hacer en seis días desde Zúrich. Todos los itinerarios son flexibles, por lo que puedes empezar en una ciudad distinta.
Aunque Suiza puede ser pequeña, hay más que suficiente que ver y hacer durante seis días. Si estás planificando tu viaje a Suiza, los siguientes itinerarios te ayudarán con ese proceso.
Todos son viables en seis días y tienen como punto de partida Zúrich. Sin embargo, si prefieres empezar en un lugar diferente, puedes adaptar tu viaje fácilmente. Zúrich está muy bien conectada y se puede alcanzar desde cualquier otra ciudad en Suiza.
Algunos itinerarios terminan en Ginebra o pasan por ciudades cercanas a Ginebra. Así que si planeas entrar en Suiza por el oeste, simplemente ajusta el itinerario según tus preferencias. Un itinerario, por ejemplo, comienza en Zúrich y pasa por Lausana. Si comienzas en Ginebra, puedes comenzar fácilmente este itinerario en Lausana, que está a solo media hora en tren de Ginebra.
Notarás que solo hablo de viajar en transporte público y no en coche. La mayoría de los itinerarios también son posibles en coche, en caso de que decidas alquilar uno durante tu estancia en Suiza. Pero con nuestra densa red de trenes y autobuses, no hay necesidad real de viajar en coche.
Por supuesto, la elección es tuya.
Además, si tienes más de seis días disponibles y ves un itinerario de Suiza que te gusta, puedes extenderlo fácilmente pasando una noche adicional en algunos de los lugares.
¡Feliz planificación!
Destacados en esta ruta:
Explora Zúrich por la mañana a tu ritmo, alquila una bicicleta gratis con «Züri rollt» o únase a una visita guiada por la ciudad. Después de la gira, compra un almuerzo para llevar y toma el tren hacia Bellinzona.
Gracias al túnel de base del Gotardo de 57 km, ahora tardas menos de dos horas en atravesar los Alpes y llegar al cálido sur de Suiza.
Haz una parada en Bellinzona y visita el Castello di Montebello, un Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, antes de continuar hacia Locarno.
Pasa el resto de la tarde disfrutando de la atmósfera italiana en Locarno. Quédate en la Piazza Grande, pasea por el Lago Maggiore o disfruta de unas bolas de helado junto al lago. Y si te lo preguntas: sí, todavía estás en Suiza. Aunque se sienta más como Italia.
Dado que pasarás las próximas tres noches en el Tesino, tienes derecho al magnífico Ticino Ticket. Lo recibirás al registrarte en tu alojamiento.
Con esta práctica tarjeta para huéspedes, puedes utilizar el transporte público en todo el Tesino de forma gratuita. Además, obtienes numerosas reducciones en otras atracciones y actividades.
Prepárate para explorar la parte italiana de Suiza en todo su esplendor. Con la abundancia de actividades que tienes a tu disposición, hoy no te aburrirás.
Primero, te recomiendo que te dirijas a uno de los dos valles fluviales: Maggia o Verzasca. Ambos son excelentes para hacer senderismo, disfrutar del tiempo junto al río o tomar un refrescante baño. No olvides empacar tu picnic. En ambos valles hay innumerables lugares donde hacer una pausa. Mi lugar favorito está justo debajo del famoso puente de piedra en Lavertezzo.
Si prefieres aguas más tranquilas que los fríos arroyos de montaña, deberías ir al Lago Maggiore o al Lago de Lugano. Ambos lagos son impresionantes y te ofrecen más oportunidades fotográficas de las que puedes imaginar.
Otros destinos populares en Ticino son la inspiradora ciudad artística de Ascona, cerca de Locarno, y la ciudad de Lugano más al sur.
Si quieres refrescar tus conocimientos sobre la geografía suiza, visita el Swissminiatur en Melide, justo fuera de Lugano. Es una versión en miniatura de Suiza y muestra un increíble amor por los detalles.
Si eres uno de esos adictos a la adrenalina, al final del valle de Verzasca encontrarás el 007 Bungy. Quizás ya hayas visto este salto de 220 metros en la película de James Bond Golden Eye. Si decides lanzarte desde la represa, no olvides compartir tu foto con nosotros. Nos encantaría verlo... 🙂
Como ya habrás notado, este día no es ni de lejos lo suficientemente largo para hacer todo lo de la lista. Bien, siempre hay mañana.
Haz todo lo que te perdiste ayer. La lista debería ser lo suficientemente larga como para mantenerte ocupado un día más.
Alternativamente, puedes salir de Suiza y cruzar la frontera hacia Italia. No muy lejos de Lugano se encuentra la idílica región de Como, el lugar donde George Clooney y otras celebridades se han casado. Si quieres saber qué ha visto el Sr. Nespresso en esta parte del mundo, hoy es tu oportunidad.
Los dos lugares más hermosos de la región que te recomiendo son la ciudad de Como y el pueblo de Menaggio. Ambos se encuentran a orillas del lago de Como y te encantarán.
Al final del día, regresas a Suiza y disfrutas del tiempo que te queda en Locarno, antes de continuar mañana a Zermatt.
Probablemente te rías ahora. Pero la estación de tren de donde sale tu tren a Domodossola se llama Locarno FART. (Eso significa "pedo" en inglés). Un nombre desafortunado, lo sé. Es la abreviatura de Ferrovie Autolinee Regionali Ticinesi y se traduce como "Ferrocarril Regional del Tesino".
El viaje a Domodossola dura casi dos horas. Es posible que este sea el tren más lento con el que hayas viajado. No tiene prisa por llegar a Domodossola.
Pero probablemente no te darás cuenta de cómo pasa el tiempo. El paisaje es abrumador de principio a fin. Durante el trayecto a través de Centovalli - que significa cien valles - pasarás por varios encantadores pueblos con casas de piedra antiguas. Además, cruzarás altos viaductos y podrás echar un vistazo a alguna que otra cascada.
Disfruta de la vista, porque de Domodossola a Brig pasarás la mayor parte del tiempo en un túnel. Pero eso no importa, porque el trayecto de Brig a Zermatt es parte del Glacier Express, otro recorrido en tren lleno de panoramas.
Al llegar a Zermatt, puedes pasar el resto del día paseando por el famoso destino turístico y disfrutando de la vista del poderoso Matterhorn, siempre y cuando la montaña no esté envuelta en nubes.
En Zermatt, el mundo montañoso y la naturaleza están en el centro. Si has venido a Suiza por las espectaculares vistas de las montañas, te encantará este lugar.
Numerosas caminatas y paseos de todos los niveles de dificultad te llevarán a lugares que ni siquiera sabías que existían. Uno de ellos es el popular camino de los 5 lagos de Zermatt, que te llevará aproximadamente 2.5 horas. Pasa por cinco lagos de montaña de agua cristalina y ofrece continuamente impresionantes vistas del Matterhorn.
Otra aventura que podría hacerte sentir un poco mareado es cruzar el puente colgante peatonal más largo del mundo en Randa. Con una longitud de 494 m, se extiende sobre el valle. La ruta circular hasta el puente comienza y termina en Randa, a 15 minutos en tren de Zermatt.
Si prefieres omitir la caminata y ver las montañas de una manera más sencilla, te recomiendo subir al Gornergrat. Después de un increíble viaje en tren muy empinado, te encontrarás a una altitud de 3089 m sobre el nivel del mar. Justo frente al glaciar Gorner y al Matterhorn. No te sorprendas si al subir las escaleras hacia el mirador te quedas sin aliento. No es por ti, sino por el aire diluido.
En Zermatt, definitivamente hay más para hacer que solo en un día. Hoy es el momento perfecto para tachar todo lo que no lograste hacer ayer.
En cuanto estés listo para dejar el aire fresco de las montañas, toma el tren de regreso a Zúrich. Si vuelas desde Ginebra o planeas visitar la segunda ciudad más grande de Suiza, también puedes dirigirte en esa dirección.
Destacados en esta ruta:
Explora Zúrich por la mañana a tu ritmo, alquila una bicicleta gratuita con «Züri rollt» o únete a una visita guiada por la ciudad. Después del recorrido, puedes conseguir un almuerzo para llevar y disfrutarlo en el tren hacia Chur.
Para tener una mejor vista del lago de Zúrich y del Walensee en el camino hacia Chur, te recomiendo que consigas un asiento en el lado izquierdo del tren.
Pasa una o dos horas paseando por Chur y prepárate para el aire fresco de montaña que te espera en St. Moritz. Para llegar a St. Moritz, puedes tomar el tren directo de la RhB en Chur. Mantén tu cámara lista, ya que desde el principio hasta el final serás mimado con vistas panorámicas. El viaducto de Landwasser y la sinuosa línea de Albula son dos de los puntos destacados en este recorrido.
Pasa el resto del día en St. Moritz. Si esta noche te sientes inusualmente somnoliento, es gracias a la altitud de 1822 m sobre el nivel del mar. Normalmente, se necesitan uno o dos días para aclimatarse a la menor cantidad de aire.
Hoy pasarás algunas horas cruzando los Alpes de St. Moritz a Lugano. Tu viaje te lleva hasta el punto más alto de la línea del Bernina Express, pasando por glaciares brillantes y lagos de montaña cristalinos, bajando hacia la parte sur de Suiza y sobre un espectacular viaducto, antes de llegar a Italia.
Y finalmente de vuelta a Suiza…
La primera etapa de este trayecto en tren te lleva a Ospizio Bernina, el punto más alto del viaje de hoy. Esta pequeña estación no está lejos de St. Moritz y se encuentra a 2253 m sobre el nivel del mar. Desde aquí todo es cuesta abajo. Por supuesto, solo en sentido figurado. En el camino hacia Italia, cruzarás en Brusio el viaducto en espiral. Aquí, el tren realiza un giro completo de 360 grados para superar la altura.
A este punto ya has perdido bastante altura y la temperatura exterior es mucho más cálida que hace unas horas. La última etapa del viaje comienza en Tirano, justo en la frontera suizo-italiana. Desde Tirano, el autobús del Bernina Express te llevará a través de la impresionante región vinícola de Veltlina.
Antes de volver a entrar en Suiza, pasarás por el Lago de Como. El lugar donde George Clooney y muchas otras celebridades se han casado.
Después de este largo día, puedes estirar las piernas en el paseo junto al lago de Lugano. Disfruta de la vista, tómate unas bolas de helado y pasea por Lugano.
Te lo mereces.
Como pasarás las próximas dos noches en el cantón de Ticino, tienes derecho a obtener el magnífico Ticino Ticket. Lo recibirás al registrarte en tu alojamiento.
Con esta práctica tarjeta de huésped, puedes utilizar el transporte público en todo Ticino de forma gratuita. Además, obtendrás numerosas reducciones en otras atracciones y actividades.
Si quieres saber qué puedes hacer en la zona, vuelve a consultar el Día 2 del Plan de Viaje nº 1. Allí encontrarás actividades para aproximadamente tres días. Con esto deberías tener suficiente para mantenerte ocupado un buen rato.
Alternativamente, también puedes salir de Suiza y cruzar la frontera hacia Italia. No muy lejos de Lugano, se encuentra la idílica región de Como, el lugar donde George Clooney y otras celebridades se han casado. Si quieres saber qué ha visto el Sr. Nespresso en esta parte del mundo, hoy es tu oportunidad.
Los dos lugares más hermosos de la región que te recomiendo son la ciudad de Como y el pueblo de Menaggio. Ambos están ubicados a la orilla del lago de Como y te encantarán. Al final del día, regresas a Suiza y disfrutas del tiempo que te quede en Lugano.
Si visitas Suiza entre abril y octubre, tienes suerte. Si no dejas el Ticino un lunes, tienes la posibilidad de regresar a través de los Alpes con el Gotthard Panorama Express.
En la primera etapa de este viaje, un tren panorámico te lleva a través del antiguo túnel de Gotthard hasta Flüelen. Antes de que se inaugurara el túnel base de Gotthard en 2016, esta era la única forma de llegar al Ticino en tren. Hoy, desde la apertura del túnel más largo del mundo, el antiguo túnel solo se utiliza con fines turísticos.
En Flüelen sigue un viaje de tres horas en un barco de vapor por el lago de Lucerna. Llegarás alrededor de las 15:00 horas a Lucerna, justo al lado de la estación de tren. Así que tendrás tiempo suficiente para explorar esta hermosa ciudad y sus alrededores. Si no puedes tomar el Gotthard Panorama Express a Lucerna, simplemente súbete al tren regular hacia Lucerna.
Lucerna tiene muchísimo que ofrecer. Una de las excursiones más emocionantes es el viaje en el funicular más empinado del mundo hacia el Pilatus, la montaña de Lucerna. Este tren solo opera en verano desde Alpnachstad, mientras que el teleférico desde Kriens va al Pilatus todo el año.
Hablando de montañas: el Titlis es otro de los íconos de la región que vale la pena visitar. Desde Engelberg, puedes alcanzar la cima con dos teleféricos. Uno de ellos es el primer teleférico giratorio del mundo. Así que te espera una impresionante vista de 360 grados.
Para una caminata ligera que incluye un viaje en un ascensor de 152.8 m de altura, puedes tomar un barco o un autobús a Kehrsiten-Bürgenstock.
No podemos olvidar el Stanserhorn, una montaña cerca de Lucerna, a la que se accede a través de un moderno teleférico de dos pisos. Lo mejor es tomar el barco a Stansstad. Allí, cambias a la funicular para la primera etapa y viajas el último tramo en la góndola al aire libre hacia el Stanserhorn.
Teóricamente, también puedes viajar a Interlaken en este día libre. Sal de Lucerna por la mañana con la línea Golden Pass, pasa el día explorando la fotogénica región alrededor de Interlaken y regresa a Lucerna por la tarde.
Otra gran opción para pasar el día en los alrededores de Lucerna es un paseo por el lago de los Cuatro Cantones. En el lago navegan varios barcos de vapor y de pasajeros que te llevarán a una excursión con vistas impresionantes.
Como puedes ver, Lucerna tiene mucho que ofrecer en un día soleado. Pero en realidad, el clima no siempre es tan prometedor. En este caso, aquí tienes algunas geniales opciones en interiores.
Por un lado, está Aeschbachs Chocoworld en Root. El viaje en autobús allí dura aproximadamente 30 minutos. ¿Hay algo que ilumine un día lluvioso como la deliciosa chocolate, verdad?
En Hergiswil, no muy lejos de Lucerna, encontrarás lo que los suizos cariñosamente llaman la "Glasi". La fábrica de vidrio de Hergiswil te lleva a través del proceso de fabricación del vidrio, te permite observar a los profesionales en acción e incluso te da la oportunidad de probar el soplado de vidrio tú mismo. ¿Cuándo fue la última vez que hiciste tu propio vaso?
Otra opción para mal tiempo es el Museo del Transporte de Lucerna. Como su nombre indica, en este museo todo gira en torno a los medios de transporte. Desde bicicletas hasta la astronáutica, ¡aquí hay de todo!
Por suerte, hoy solo tienes que dejar Lucerna por la tarde o incluso por la noche. Así que puedes pasar el día haciendo lo que no pudiste hacer ayer. También puedes explorar la ciudad por tu cuenta, pasear por el Puente de la Capilla, visitar el Jardín de Glaciares con el famoso Monumento al León o unirte a un tour por la ciudad.
Una actividad muy popular cerca de Lucerna es una excursión al Rigi. Cómo llegar exactamente a la Reina de las Montañas lo descubrirás en el siguiente itinerario número 3, día 2.
Al final del día, puedes tomar el tren de vuelta a Zúrich y pasar el resto del día explorando la ciudad más grande de Suiza.
Aspectos destacados en esta ruta:
Sal de Zúrich por la mañana y toma el tren a Lucerna. Guarda tu equipaje ya sea en la estación de tren o en tu alojamiento y toma el próximo tren hacia Arth Goldau. Desde aquí, el tren de montaña Rigibahn - el primer tren de montaña de Europa - te lleva en un viaje de 45 minutos a la estación de montaña Rigi Kulm.
Si Rigi no está cubierto por nubes, tendrás una vista espectacular de los Alpes, el lago de Cuatro Cantones y otros lagos circundantes. Simplemente sigue las señales hacia el mirador después de desembarcar en Rigi Kulm.
Cuando hayas tomado suficientes fotos, puedes hacer una pausa en el restaurante, bajar en tren a Vitznau o ir de excursión. Con más de 120 kilómetros de senderos, aquí tienes una amplia variedad de opciones.
Cuando llegues a Vitznau, te estará esperando el barco de pasajeros hacia Lucerna. Ten tu cámara lista, ya que el viaje es paisajísticamente impresionante y ofrece aún más vistas deslumbrantes.
De regreso en Lucerna, puedes pasar el resto de la tarde explorando la ciudad o encontrar un lugar acogedor junto al lago para relajarte.
Lucerna tiene mucho que ofrecer. Una de las excursiones más emocionantes es el viaje en el funicular más empinado del mundo hacia el Pilatus, la montaña emblemática de Lucerna. Este tren solo opera en verano desde Alpnachstad, mientras que el teleférico desde Kriens lleva al Pilatus durante todo el año.
Hablando de montañas: el Titlis es otro hito de la región que vale la pena visitar. Desde Engelberg, puedes llegar a la cima con dos telecabinas. Una de ellas es la primera telecabina giratoria del mundo. Te espera una impresionante vista de 360 grados.
Para una caminata ligera que incluye un viaje en el ascensor de 152,8 metros de altura, puedes tomar un barco o un autobús hacia Kehrsiten-Bürgenstock.
No olvidemos el Stanserhorn, una montaña cerca de Lucerna, a la que se accede mediante un moderno teleférico de doble piso. Lo mejor es tomar un barco hacia Stansstad. Aquí cambias a la funicular para la primera etapa y tomas el último tramo en el telecabina al aire libre hacia el Stanserhorn.
Teóricamente, también podrías ir a Interlaken en este día libre. Sal de Lucerna por la mañana con la Golden Pass Line, pasa el día explorando la fotogénica región de Interlaken y regresa a Lucerna por la tarde.
Otra excelente manera de pasar el día en los alrededores de Lucerna es un paseo por el lago de los Cuatro Cantones. En el lago navegan varios barcos de vapor y de pasajeros que te llevarán en una excursión panorámica.
Como puedes ver, Lucerna tiene mucho que ofrecer en un día soleado. Pero en la realidad, el clima no siempre es tan prometedor. En este caso, aquí hay algunas opciones geniales bajo techo para ti.
Por un lado, está el Chocoworld de Aeschbach en Root. El viaje en autobús hasta allí dura aproximadamente 30 minutos. ¿Hay algo que ilumine un día lluvioso mejor que el chocolate delicioso, verdad?
En Hergiswil, no muy lejos de Lucerna, encontrarás lo que los suizos cariñosamente llaman la "Glasi". La fábrica de vidrio de Hergiswil te guiará a través del proceso de fabricación del vidrio, te permitirá observar a los profesionales en acción e incluso te ofrecerá la oportunidad de intentar hacer vidrio tú mismo. ¿Cuándo fue la última vez que hiciste tu propio vidrio?
Otra opción en mal tiempo es el museo del transporte en Lucerna. Como su nombre indica, este museo se centra en los medios de transporte. Desde bicicletas hasta astronautas, aquí hay de todo.
Por suerte, hoy solo tienes que abandonar Lucerna al mediodía. Así que no tienes prisa y puedes dedicar la mañana a lo que no lograste hacer ayer.
Alternativamente, también puedes explorar la ciudad por tu cuenta, pasear por el Puente de la Capilla, visitar el Jardín Glaciar con el famoso monumento al león o participar en una visita guiada gratuita por la ciudad.
Asegúrate de abrir bien el apetito y no comprarte un almuerzo demasiado grande para el trayecto a Trubschachen. Te alegrarás de tener cada espacio libre en tu estómago cuando te encuentres con todas las deliciosas galletas en Trubschachen.
El tren a Trubschachen se divide en el camino y solo la parte delantera viaja a través del pintoresco Entlebuch hacia la Fábrica Kambly. Cuando estés en el andén de Lucerna, presta atención a la pantalla para asegurarte de que subes a la parte correcta del tren.
Para la tienda de la fábrica Kambly justo al lado de la estación de tren en Trubschachen, no necesitas boleto. La entrada es gratuita. Aquí puedes pasar tanto tiempo como quieras y probar hasta 100 variedades de deliciosas galletas.
Desafortunadamente, no puedes visitar la fábrica directamente y observar la producción de este tradicional edificio suizo. Sin embargo, hay un cine en la tienda donde puedes aprender más sobre la empresa familiar Kambly.
Si estás a punto de explotar o simplemente no puedes comer más dulces, continúas hacia Berna. Para digerir tu sobredosis de Kambly, puedes dar un paseo por la capital de Suiza. Para una vista impresionante de Berna, te recomiendo subir al Jardín de las Rosas.
Hoy harás una excursión de un día a uno de los lugares más populares de Suiza. Interlaken parece estar en la lista de casi todos los visitantes que vienen a Suiza. Y aunque hay muchos otros lugares con vistas impresionantes y perfectas oportunidades de senderismo, difícilmente encontrarás un lugar tan orientado al turismo como Interlaken.
Una lista detallada de actividades en y alrededor de Interlaken la encontrarás en el Día 2 del itinerario Nº 5, donde he recopilado una lista de actividades para aproximadamente tres días. Con esto deberías estar ocupado un tiempo.
Si sales de Berna temprano en la mañana, tendrás tiempo suficiente para tomar el barco de pasajeros en Thun hacia Interlaken. Este paseo en barco dura poco más de dos horas y probablemente te quitará el aliento.
Pasarás por encantadores pueblos y altas montañas mientras cruzas todo el Lago de Thun, antes de llegar a Interlaken. Esta es probablemente una de las travesías en barco más hermosas de Suiza. Y aunque el clima no sea perfecto, es una experiencia mística que vale la pena disfrutar.
Además, el viaje está completamente cubierto con un pase Interrail, Eurail o Swiss Travel Pass. No te pierdas la oportunidad…
Después del desayuno, tienes algo de tiempo para seguir explorando Berna. Participa en un recorrido por la ciudad o explora Berna por tu cuenta. Pasea por el casco antiguo, visita el Parque de los Osos, observa el Palacio Federal y camina de regreso al Jardín de las Rosas para disfrutar de la vista.
También puedes visitar el Gurten, la montaña de Berna, observar los animales en el parque zoológico Dählhölzli o visitar el Jardín Botánico. Toma el ascensor en la estación de tren y disfruta de la vista en la Gran Terraza o ve a nadar en el Aare o en la Weyermannshaus.
Es evidente que medio día no será suficiente para realizar todas estas actividades. Pero como Montreux también tiene mucho que ofrecer, te sugiero que salgas de Berna al mediodía. Llévate un almuerzo para llevar que puedas comer en el tren hacia Montreux. Así ahorrarás tiempo y podrás pasar toda la tarde en Montreux.
Una vez que hayas dejado tu equipaje en tu alojamiento en Montreux, deberías dirigirte a la promenade y ver la estatua de Freddie Mercury frente al mercado. Si deseas visitar el famoso Castillo de Chillon, puedes seguir la promenade hasta el castillo o tomar el autobús. También hay barcos de pasajeros que navegan regularmente entre Montreux y el Castillo de Chillon.
Alternativamente, también puedes ir en la otra dirección hacia los viñedos de Lavaux. A solo un corto trayecto en tren al oeste de Montreux, encontrarás los famosos viñedos de Lavaux, que son Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. Para disfrutar de las impresionantes vistas, baja en Cully o Epesses y sigue el sendero señalizado a través de las vides.
El día de hoy gira en torno al queso y al chocolate. Después de todo, Suiza es famosa por ello. Así que toma el tren a Gruyères y prepárate para un festín y un pueblo medieval.
La quesería de Gruyère se encuentra justo detrás de la estación de tren. Aquí puedes observar cómo se elabora el tradicional queso Gruyère. Las degustaciones, por supuesto, están incluidas. Cuando termines de probar, puedes tomar el autobús o seguir el camino hasta llegar al centro de Gruyères. Este paseo te tomará aproximadamente 20 minutos.
La principal atracción en Gruyères es probablemente el castillo, que está abierto al público y cuesta 12 CHF la entrada. Pero también las empedradas callejuelas ocultas y las innumerables tiendas de souvenirs seguramente te llevarán a quedarte más tiempo del que esperabas.
Después de explorar Gruyères y quizás comprar algún souvenir, puedes ir a Broc y visitar La Maison Cailler. En su centro de visitantes aprenderás todo lo que necesitas saber sobre la marca de chocolate más antigua de Suiza. Al final del recorrido, te espera un buffet donde podrás probar cantidades ilimitadas de chocolate.
En el viaje de regreso en tren a Montreux y luego a Ginebra, puedes intentar digerir tu sobredosis de queso y chocolate. Pasa el resto del día en Ginebra y explora la segunda ciudad más grande de Suiza.
También tienes la opción de cambiar el éxtasis del chocolate y el queso por una visita a un glaciar. En lugar de ir a Gruyères, puedes tomar el tren a Col-du-Pillon y visitar el Glacier 3000.
La vista de 360 grados es impresionante. Y si te sientes lo suficientemente valiente, el Peak Walk sobre el puente colgante es una experiencia que no olvidarás fácilmente.
Destacados en esta ruta:
Explora Zúrich por la mañana a tu propio ritmo, alquila una bicicleta gratuita con «Züri rollt» o únete a un tour guiado por la ciudad. Después de la visita, consigue un almuerzo para llevar y viaja en tren a San Galo.
Pasa la tarde explorando el casco antiguo de San Galo. Con el área de la Catedral de San Galo, protegida por la UNESCO, su poderosa catedral y la impresionante biblioteca del monasterio, esta ciudad tiene mucho que ofrecer.
No te pierdas el área recreativa “Tres estanques”. Puedes llegar allí ya sea en el Mühleggbahn o a pie por una de las muchas escaleras. Alternativamente, también puedes visitar el parque salvaje Peter & Paul o saciar tu sed cultural en uno de los muchos museos.
El mejor lugar para relajarse es en los “Tres estanques”. Aquí puedes nadar o dar un paseo por el bosque. Además, tendrás una vista fantástica de toda la ciudad, el lago de Constanza e incluso hasta Alemania.
Los siguientes dos días estarán completamente dedicados a explorar la cordillera llamada Alpstein. Deja todo el equipaje que no necesites en St. Gallen y prepárate para una maravillosa caminata.
Las opciones de senderismo en esta montaña son prácticamente infinitas. Ya sea que quieras visitar el famoso restaurante Äscher o darte un baño en el encantador Seealpsee, aquí encontrarás lo que buscas.
Dado que tienes dos días a tu disposición, te presento una de mis caminatas favoritas en Alpstein. Comienza en Brülisau, pasa por dos lagos de montaña, te llevará a disfrutar de leche y queso frescos, puede incluir una noche en un establo sobre las vacas y definitivamente dejará algunos músculos cansados.
Primero, dirígete a Brülisau en el cantón de Appenzell Innerrhoden. Desde aquí comienzas tu caminata hacia el restaurante Ruhesitz, que se encuentra aproximadamente a mitad de camino hacia la montaña Hoher Kasten. Desde Ruhesitz, sigue las señales que te llevarán al Sämtisersee. Ahora puede que estés listo para un descanso. Pasa tanto tiempo como desees junto a o en este hermoso lago de montaña.
Desde Sämtisersee, continuarás hasta que llegues a Bollenwees en Fälensee. Si buscas un poco más de comodidad, puedes pasar la noche en esta casa de montaña. Bollenwees ofrece habitaciones privadas o dormitorios con duchas y un restaurante. La vista del lago es incomparable. Y después de este largo día de caminata, probablemente estarás feliz de simplemente estirar las piernas y disfrutar del impresionante paisaje.
Sin embargo, si tienes ganas de un poco de aventura, deberías caminar un poco más. Si sigues el Fälensee hasta el final, llegarás a la Fälenalp. En esta pequeña alp, una familia de agricultores pasa el verano con sus vacas, cabras y cerdos. La familia de agricultores ofrece camas en un gran dormitorio en el establo sobre las vacas y le gusta cocinar una deliciosa cena para ti.
Si decides quedarte a dormir en Bollenwees, te aconsejo que aún así hagas una caminata hacia Fälenalp para ver este lugar mágico y probar el queso fresco de cabra. Ya sea hoy, después de alojarte en Bollenwees, o mañana, antes de regresar a St. Gallen.
Donde sea que hayas pasado la última noche, espero que hayas dormido bien en este fresco aire de montaña. Normalmente, después del desayuno, me dirijo directamente a casa. Pero depende totalmente de ti cómo planeas tu día. Aún no has agotado tus opciones de senderismo, así que puedes seguir caminando tanto como desees.
Una opción es ascender al Bogartenmannli y finalizar tu caminata en Wasserauen, después de pasar por el Seealpsee. Así, deberías llegar a St. Gallen en tren por la tarde. O simplemente camina de regreso a Brülisau a través del Sämtisersee y Brüeltobel. El mundo está a tus pies.
En el camino de regreso a St. Gallen, puedes hacer una breve parada en Appenzell, la encantadora capital del cantón de Appenzell Innerrhoden. Si tienes el valor suficiente, visita la pequeña tienda de quesos en la Hauptgasse 13. Pero ten cuidado, los olores de queso apestoso te dejarán asombrado.
Tus pies definitivamente no pueden competir con este olor. Ni siquiera si han estado atrapados durante dos días en tus botas de senderismo... 🙂
Oh, y no te pierdas un delicioso trozo de Appenzeller Biber. Esta es una tradicional golosina local hecha de pan de especias con un relleno de miel y almendra. Y antes de que preguntes: No. Este castor no tiene parientes famosos canadienses...
Si te gusta la cerveza, definitivamente deberías visitar la cervecería Locher. Allí se elabora la popular cerveza Quöllfrisch, que se consume en toda Suiza.
Por la noche, regresas a St. Gallen y disfrutas de dormir como un bebé esta noche. El fresco aire de montaña generalmente te deja en paz y exhausto.
Diría que hoy te has ganado un día un poco más tranquilo. Después de dos días intensos y posiblemente agotadores en el Alpstein, puedes hacer una excursión relajante al Bodensee.
Este lago tiene 63 km de largo y hasta 14 km de ancho, y está dividido entre Alemania, Austria y Suiza. Es uno de los lagos más grandes de Europa y se puede llegar fácilmente en tren desde St. Gallen.
En esta zona trinacional, hay una gran cantidad de atracciones y actividades por descubrir. Por ejemplo, la pintoresca ciudad de Konstanz en Alemania, que está a solo unos minutos a pie de Kreuzlingen. La mayoría de los suizos van allí para comprar barato. Pero Konstanz tiene mucho más que ofrecer que solo una gran oferta de compras.
Con su encantador casco antiguo, una variedad de cafeterías, restaurantes, heladerías y lugares tranquilos a orillas del lago, Konstanz atrae a muchos visitantes en los meses más cálidos.
Si te interesan los peces y otros seres que viven bajo el agua, el Sea Life siempre es una buena opción en caso de mal tiempo.
Por supuesto, no necesitas salir del país para disfrutar del Bodensee al máximo. Visita una de las muchas playas, nada, haz un paseo en barco, alquila una tabla de paddle surf, coge una bicicleta y sigue los senderos ciclistas, o disfruta de un paseo a lo largo de la orilla del lago.
El cantón de Thurgau, que constituye la mayor parte de la parte suiza del Bodensee, es famoso por sus manzanos. Una de las caminatas que recomiendo en esta área es el Altnauer Apfelweg. Es especialmente idílico cuando los árboles florecen en abril y mayo o durante la época de cosecha en otoño. El camino se divide en tres senderos separados, todos con paneles informativos sobre diversos temas. Si combinan los tres senderos, sabrás todo lo que hay que saber sobre las manzanas. Además, a lo largo del camino hay muchas oportunidades para comprar y degustar diferentes productos de manzana.
Otros lugares interesantes en el Bodensee son las ciudades de Romanshorn, Rorschach y Kreuzlingen. Cuando estés listo, tomarás el tren de regreso a St. Gallen para pasar una última noche.
Probablemente ya hayas visto suficiente de St. Gallen, así que toma tus maletas por la mañana y sube al Voralpen-Express hacia Lucerna. El Voralpen-Express pasa por paisajes muy pintorescos y tarda un poco más de dos horas en llegar a Lucerna.
De todos los muchos viajes en tren panorámicos en Suiza, este es uno que es considerablemente menos turístico. No hay grandes ventanas panorámicas ni una voz amable que te diga qué viaducto acabas de cruzar.
Pero eso no hace que el viaje sea menos valioso.
Te recomiendo que interrumpas tu viaje a mitad de camino y bajes en Rapperswil. La ciudad es una joya escondida en la parte inferior del lago de Zúrich. Visita el castillo, pasa un tiempo con los ciervos en el jardín del castillo, nada en el lago de Zúrich y pasea por el idílico paseo marítimo.
Un lugar excelente para relajarse es el prado detrás de la OST, la Hochschule für Technik en Rapperswil. No puedes perdértelo si vas del tren hacia el lago.
Si quieres dar un ligero paseo, sigue el camino de madera y el puente de conexión hacia Pfäffikon. Recorrerás tres kilómetros del Camino de Santiago, una ruta de peregrinación que va desde varios lugares de Europa hasta Santiago de Compostela en España.
Cuando estés listo para continuar, sube al siguiente tren hacia Lucerna y pasa la tarde explorando la ciudad. Pasea por el puente de la capilla, deambula por el casco antiguo, disfruta del lago o visita el jardín glacial con el famoso monumento del león.
Una lista detallada de actividades en Lucerna la encontrarás en el día 2 del itinerario n.º 3.
Por suerte, hoy no tienes prisa y puedes disfrutar de Lucerna hasta la tarde o incluso hasta la noche. Así que tienes tiempo suficiente para hacer todo lo que no pudiste hacer ayer.
Una excursión popular desde Lucerna es un desvío a Rigi. Para llegar allí, puedes dejar tu equipaje en tu alojamiento en Lucerna o en la estación de tren y tomar el tren a Arth Goldau. Desde aquí, el tren de montaña Rigi - el primer tren de montaña de Europa - te lleva en un viaje de 45 minutos a la estación de montaña Rigi Kulm.
Si Rigi no está cubierta por nubes, tendrás una vista espectacular de los Alpes, el lago de los Cuatro Cantones y otros lagos cercanos. Simplemente sigue las señales hacia el mirador, después de bajarte en Rigi Kulm.
Una vez que hayas tomado suficientes fotos, puedes hacer una pausa en el restaurante, bajar en tren a Vitznau o ir a caminar. Con más de 120 kilómetros de senderos, tienes muchas opciones aquí.
Al llegar a Vitznau, te espera el barco de pasajeros hacia Lucerna. Ten tu cámara a mano, porque el viaje es paisajísticamente impresionante y ofrece aún más vistas espectaculares.
De vuelta en Lucerna, recoge tu equipaje y regresa a Zúrich.
Aspectos destacados de esta ruta:
Sal de Zúrich por la mañana, dirígete a Lucerna y pasa unas horas explorando la ciudad. Pasea por el Puente de la Capilla, deambula por el casco antiguo, relájate junto al lago o visita el Jardín Glacial. Luego, continúa hacia Interlaken alrededor del mediodía.
La línea Golden Pass es una popular ruta panorámica de Lucerna a Montreux, operada por varias compañías de trenes. Conecta el centro de Suiza con la orilla del Lago de Ginebra.
La ruta panorámica pasa por ocho lagos, atraviesa seis cantones diferentes, cruza tres pasos de montaña y conecta dos regiones lingüísticas. La etapa de hoy entre Lucerna e Interlaken es operada por el Centralbahn y dura casi dos horas.
Al llegar a Interlaken, pasarás la tarde en esta popular y turística ciudad. Aquí hay innumerables actividades. Si deseas disfrutar plenamente de esta región, una noche no será suficiente. Sin embargo, debería haber tiempo suficiente para un paseo a lo largo del Aare o una breve excursión al Harder Kulm.
Durante los próximos dos días, tendrás más actividades para elegir de las que puedes imaginar. Todo depende de tu presupuesto, pero en Interlaken no hay límites.
¡Si es que hay alguno!
El salto en paracaídas, el parapente, el canyoning y el paseos en jetboat son actividades populares que pondrán tu adrenalina en marcha.
Una opción un poco más relajante es un viaje en barco de pasajeros por el lago de Thun o el lago de Brienz. En ambos lagos disfrutarás de vistas increíbles y desearás no tener que marcharte nunca. Si deseas hacer una parada en uno de los paseos en barco, puedes bajar en Giessbach (lago de Brienz), en las Cuevas de St. Beatus o en Spiez (lago de Thun).
La región de Jungfrau alrededor de Interlaken es también un excelente lugar para los senderistas. La cantidad de senderos es prácticamente infinita. Independientemente de tu nivel de fitness y ambiciones, aquí encontrarás algo que se adapte a tus gustos.
Por supuesto, el famoso Jungfraujoch - también conocido como el Top de Europa - es el destino número 1 que todos quieren ver. Con el tren de Jungfrau, subirás hasta la estación de tren más alta de Europa y te encontrarás en medio de impresionantes montañas y glaciares.
Si buscas una alternativa más económica al Jungfraujoch, te recomiendo visitar en su lugar el Schilthorn, la Schynige Platte, Grindelwald First o el Männlichen. Los viajes a estas montañas y las vistas desde la cima no te decepcionarán.
Otras atracciones en y alrededor de Interlaken son: El museo al aire libre Ballenberg, la chocolatería en Funky Chocolate Club, los dos lagos de montaña Blausee o Oeschinensee o el desfiladero de Aare. Y no olvides las encantadoras ciudades y pueblos como Brienz, Spiez, Thun, Lauterbrunnen o Grindelwald.
Puedo seguir hablando de esto eternamente. Pero creo que solo te haría enojar al desear no pasar toda la semana aquí.
Hoy te espera otra delicia paisajística. En cuanto salgas de Interlaken en dirección a Zweisimmen, tendrás el lago de Thun a tu derecha. Para tener la mejor vista del lago, te recomiendo conseguir un asiento en el lado derecho del tren.
Después de poco más de una hora de viaje, debes cambiar a otro tren en Zweisimmen. Allí comienza la subida a través de la región de Oberland bernés hacia Gstaad. Esta región es un sueño absoluto para los amantes de las montañas y resume casi todo lo que hace a Suiza. En esta área hay varias abundancias de lagos, montañas, praderas verdes con vacas pastando, glaciares, un montón de senderos de caminata, paisajes maravillosos y bonitos pueblitos.
En Gstaad tienes varias opciones para pasar la tarde. Dado que esta área es un paraíso para los excursionistas, aquí tienes un dilema. Una posible caminata te lleva al lago Lauenensee, un lago de montaña rodeado de pantanos.
Una excursión que se puede hacer fácilmente desde Gstaad es visitar el impresionante Glacier 3000. Después de un viaje en autobús de 35 minutos hasta el Col du Pillon, llegarás a la estación base del teleférico. Sube a la góndola y disfruta del viaje. Al llegar arriba, te espera una vista panorámica de 360° sobre los Alpes.
En un día despejado, puedes ver algunos de los más famosos gigantes montañosos de los Alpes, como el Matterhorn, el Mont Blanc y el famoso trío Eiger, Mönch y Jungfrau. Si eres lo suficientemente valiente, deberías atreverte a caminar por el Peak Walk hacia el Scex Rouge. Este es el primer puente colgante del mundo que conecta dos cumbres. En el Glacier 3000 también hay otras actividades como el trineo o una caminata sobre el glaciar.
Si paseas por Gstaad por la noche, mantén los ojos abiertos por si ves alguna celebridad. Aquí a menudo se ven famosos. Similar a St. Moritz.
Ya es hora de decir adiós a esta hermosa región. Después del desayuno, sube al tren Golden Pass y continúa tu pintoresco viaje. Después de dejar la región del Oberland bernés y bajar por las colinas, llegarás a la parte francófona de Suiza.
La línea Golden Pass termina en Montreux, donde pasarás la tarde. Disfruta de unas horas en esta hermosa zona a orillas del Lago de Ginebra, antes de antes de viajar a Berna.
Dirígete a la promenade y mira la estatua de Freddie Mercury frente al mercado. Si deseas visitar el famoso castillo de Chillon, puedes seguir la promenade hasta el castillo o tomar el autobús. También hay barcos de pasajeros que navegan regularmente entre Montreux y el castillo de Chillon.
Alternativamente, puedes ir en la otra dirección hacia los viñedos de Lavaux. A solo un corto trayecto en tren al oeste de Montreux, encontrarás los famosos viñedos de Lavaux, que son Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Para disfrutar de la maravillosa vista, baja en Cully o Epesses y sigue el sendero señalizado a través de las vinas.
Al atardecer, tomarás el tren a Berna y pasarás el resto del día en la capital de Suiza.
Hoy tienes todo el día para explorar Berna. Después de desayunar, puedes participar en una visita guiada a la ciudad o aventurarte por tu cuenta. Pasea por el casco antiguo, visita el Parque de los Osos, mira el Palacio Federal y pasea de regreso al Jardín de Rosas para disfrutar de la vista.
También puedes visitar el Gurten, la montaña local de Berna, observar los animales en el zoológico Dählhölzli o visitar el Jardín Botánico. Toma el ascensor en la estación y disfruta de la vista desde la Gran Plataforma o nada en el Aare o en el Weyermannshaus.
Oh, qué dilema…
Tan pronto como estés listo para dejar Berna, toma el tren de regreso a Zúrich. O, si sales desde Ginebra, también puedes ir en esa dirección.
Aspectos destacados de esta ruta:
Explora Zúrich por la mañana a tu propio ritmo, alquila una bicicleta gratis con «Züri rollt» o únete a una visita guiada por la ciudad. Después de la excursión, puedes comprar un almuerzo para llevar y disfrutarlo en el tren hacia Saas-Fee.
Saas-Fee, también conocida como la “perla de los Alpes”, está rodeada por las montañas más altas de Suiza. Cuando llegues a este pintoresco pueblo alpino, estarás rodeado de 13 montañas que superan los 4000 metros sobre el nivel del mar.
Pasa la tarde dando un paseo por el pueblo e intenta acostumbrarte al aire delgado de la montaña. Si ya quieres salir, encontrarás algunas ideas en el resumen de mañana.
Disfruta del aire fresco de montaña que respirarás durante todo el día. Probablemente pasarás la mayor parte del día al aire libre. Si vienes en verano, tendrás casi infinitas opciones de senderismo. Más de 350 kilómetros de senderos te llevarán a lugares de los que ni siquiera sabías que existían.
Y ya que estamos en ello, no olvides estar atento a las marmotas durante tu caminata. Tus posibilidades de ver algunas de estas adorables criaturas alpinas son bastante buenas aquí.
Pero Saas-Fee no solo es interesante durante la temporada de senderismo. Si vienes en invierno, puedes disfrutar esquiando o haciendo snowboard. Y como Saas-Fee está a gran altura, algunas veces esquiarás sobre un glaciar. No es algo que se experimente todos los días.
Más de 150 km de pistas preparadas están a tu disposición tanto tiempo como desees. Y mientras otros destinos de esquí han lidiado con la falta de nieve en los últimos años debido al calentamiento global, la seguridad de la nieve en Saas-Fee es muy alta gracias a su altitud.
Disfruta de las vistas de las montañas, la nieve, las caminatas, las marmotas y el aire fresco. Al atardecer, tomarás el autobús postal y el tren hacia Zermatt.
Una vez en Zermatt, puedes pasar el resto del día paseando por la famosa estación de vacaciones y disfrutando de la vista de la imponente Matterhorn. Siempre que la montaña no esté envuelta en nubes.
En Zermatt, el mundo montañoso y la naturaleza son el centro. Si viniste a Suiza por las vistas espectaculares de las montañas, te va a encantar aquí.
Numerosas caminatas y paseos de todos los niveles de dificultad te llevan a lugares que te dejarán sin aliento. Por ejemplo, el popular sendero de los 5 lagos de Zermatt, que te toma 2.5 horas. Pasa por cinco lagos de montaña cristalinos y ofrece vistas impresionantes del Matterhorn.
Otra aventura, que posiblemente te dé un poco de vértigo, es cruzar el puente colgante peatonal más largo del mundo en Randa. Tiene nada menos que 494 m de largo y se extiende sobre el valle. La ruta circular hacia el puente comienza y termina en Randa, a 15 minutos en tren desde Zermatt.
Si prefieres omitir la caminata y, en cambio, ver las montañas de forma más sencilla, te recomiendo tomar el tren hasta Gornergrat. Después de un increíblemente empinado trayecto en tren, te encontrarás a una altura de 3089 m sobre el nivel del mar. Justo frente al glaciar de Gorner y al Matterhorn. No te sorprendas si al subir las escaleras hacia el mirador te quedas sin aliento. No es culpa tuya, es por el aire más delgado.
Hoy viajas en el Glacier Express de Zermatt a St. Moritz. Este viaje en el "tren rápido más lento del mundo" es una experiencia única. Durante todo el trayecto, estarás acompañado por las mejores vistas que los Alpes tienen para ofrecer.
El tren sale de Zermatt dos veces al día por la mañana. El horario cambia a lo largo del año y hay algunos trenes que no recorren toda la ruta entre Zermatt y St. Moritz. Para encontrar tu conexión, consulta el horario actualizado con suficiente antelación.
Hay una razón por la que el Glacier Express es una de las rutas ferroviarias más populares de Suiza. Lo que hace que este viaje sea tan inolvidable son las fantásticas vistas que te acompañan durante todo el trayecto. El tren te llevará sobre 291 puentes, a través de 91 túneles, por tres cantones y dos regiones lingüísticas.
El viaje dura poco más de 8 horas y, dependiendo de cuándo salgas de Zermatt, llegarás a St. Moritz entre las 17:00 y las 18:00 horas.
Al llegar, puedes pasar el resto del día paseando por este elegante pueblo de montaña en Engadina.
Al igual que en Zermatt y Saas-Fee, en St. Moritz todo gira en torno a las experiencias al aire libre. En verano y en invierno. No importa si es para andar en bicicleta, hacer senderismo, practicar paddle surf, nadar, hacer windsurf, esquiar, hacer snowboard, caminar con raquetas de nieve, esquiar de fondo o simplemente dar un paseo. Aquí encontrarás todo lo que tu corazón desea.
A solo un corto trayecto de St. Moritz se encuentra el lago Silvaplana. Este es un lugar impresionante para practicar algunas de estas actividades.
Otro lugar que vale la pena visitar es Ospizio Bernina. A 2253 m sobre el nivel del mar, esta pequeña estación es el punto más alto del tren panorámico Bernina Express. Los trenes salen cada hora de St. Moritz y te llevan junto a lagos, glaciares y altas cumbres montañosas.
En lo que respecta a la gastronomía, te recomiendo dos cosas en Engadina. Primero, no te pierdas un plato de sopa de cebada de Grisons. Esta sopa con cebada, verduras y carne es un plato típico de Grisons. Te calentará en un día fresco como nada más.
En segundo lugar, date un capricho con un trozo de pastel de nuez de Engadina. Este denso y delicioso postre trae las calorías justo al lugar donde querías deshacerte de ellas. Pero vale más que la pena.
De regreso en St. Moritz, puedes pasar el resto del día paseando por la ciudad. St. Moritz no es tan encantador y místico como otros pueblos de la zona, como Samedan o La Punt. Pero es genial para hacer window shopping. Y si tienes suerte, tal vez incluso veas a alguna celebridad.
Si hay algo que no pudiste hacer ayer, hoy es tu oportunidad. El viaje en tren de regreso a Zúrich dura poco más de tres horas. Así que no tienes razón para apresurarte.
Sin embargo, si ya has visto todo y estás listo para avanzar, puedes subir al tren y pasar un poco de tiempo en algún lugar entre St. Moritz y Zúrich.
Un lugar que podría gustarte es el pintoresco pueblo de Bergün con sus impresionantes casas de piedra. Los edificios son considerados un hito de esta área. Llegarás a Bergün después de atravesar la sinuosa línea Albulaline. Aquí, el tren gana altura atravesando varias curvas y túneles a través de las montañas. Si miras por la ventana, notarás que el tren cruza las laderas del valle mientras desciende en espiral por las montañas.
Otro lugar que puedes visitar entre St. Moritz y Zúrich es Walenstadt. O más precisamente, el Walensee. Este hermoso lago es la parada perfecta en el camino de Chur a Zúrich. Es un lago impresionante y místico que, dependiendo del clima y la reflexión de la luz, recuerda a un lago escocés.
Pasa el resto de la tarde en Zúrich y disfruta de un poco de tarta de nuez de Engadina junto al lago o en Lindenhof.
Destacados en esta ruta:
Explora Zúrich en la mañana a tu propio ritmo, alquila una bicicleta gratis con «Züri rollt» o únete a una visita guiada. Después del tour, puedes conseguir un almuerzo para llevar y disfrutarlo en el tren hacia Chur.
Para tener una mejor vista del lago de Zúrich y el lago de Walensee en el camino a Chur, te recomiendo que consigas un asiento en el lado izquierdo del tren. Dedica una o dos horas a pasear por Chur y prepárate para el aire fresco de montaña que te espera en Scuol.
Antes de continuar a Scuol, puedes visitar dos de los lagos de montaña más hermosos de Suiza, que quedan muy cerca de Chur: el lago Cauma y el lago Cresta. Estos dos pintorescos lagos son muy populares tanto entre los locales como entre los visitantes.
Otro lugar fantástico en la zona es Ruinaulta, la impresionante garganta del Rin. Este sitio del Patrimonio Mundial de la UNESCO no lleva por nada el apodo de "Gran Cañón Suizo".
Hay una caminata que conecta Ruinaulta con los lagos Cauma y Cresta. Esta fácil caminata de 2.5 horas comienza en la parada de autobús de Flims Waldhaus. Dependiendo de cuánto tiempo hayas pasado hoy en Zúrich y Chur, quizás puedas hacer toda la caminata.
Cuando estés listo, regresa a Chur y toma el tren hacia Scuol.
El Engadina es un lugar hermoso. Especialmente en otoño, cuando las hojas se tiñen de amarillo, naranja y rojo. Pero también durante el resto del año, el Engadina es un lugar fantástico para visitar.
Por cuestiones de tiempo, es recomendable ir directamente por la mañana al parque nacional y explorar Scuol más tarde. Si pides amablemente, tal vez puedas dejar tu equipaje en tu alojamiento en Scuol hasta que regreses por la tarde de las montañas.
Las reglas para visitar el único parque nacional de Suiza son bastante estrictas. No puedes salir de los senderos marcados, no puedes llevarte plantas, no puedes hacer fuego, y así sucesivamente. Cuando llegues a la entrada del parque, deberías leer las señales o pasar por el centro de visitantes en Zernez para estar bien preparado.
Lo que probablemente no esperabas es que la visita al parque es gratuita. Aunque en Suiza todo parece ser más caro que en el resto del mundo, no tienes que pagar nada por el parque nacional. ¡Bastante genial, ¿no?!
El único lugar donde puedes pasar la noche en el Parque Nacional Suizo es una cabaña de montaña llamada Chamanna Cluozza. Por eso, hoy solo tienes una tarea que cumplir. Llegar a la Chamanna Cluozza.
Una caminata que te recomiendo comienza a media hora de Scuol en Zernez. Desde allí, estarás unas tres horas caminando hasta que llegues a tu refugio para la noche. La caminata no es demasiado exigente. Y si no eres uno de los excursionistas más experimentados, simplemente tómate el tiempo suficiente para recorrer el camino.
Disfruta de esta noche lejos de la civilización sin recepción telefónica y siéntate a una mesa a charlar con extraños. Te lo mereces.
Si aún no has planeado la caminata de hoy, pregunta a los propietarios de la Chamanna Cluozza por sus recomendaciones. Tienes muchas más caminatas con diferentes niveles de dificultad a tu disposición. Así que tienes un día más para explorar el parque nacional.
O puedes ponerte en marcha de regreso a Scuol directamente después del desayuno, si ya has caminado lo suficiente. La decisión depende totalmente de ti. Si buscas una alternativa relajante, el Engadin es el lugar perfecto.
Por un lado, está el balneario en Scuol. Dependiendo de lo cansados que estén tus pies de la caminata de ayer, un par de horas relajantes en las aguas termales es justo lo que necesitas.
Si no, te recomiendo que vayas a uno de los pueblos cercanos. Como por ejemplo, Guarda o Sent. Las casas de piedra que verás allí son típicas de esta parte de Suiza.
Y cuando pases junto a estos impresionantes edificios, mantén los ojos abiertos para encontrar una panadería. De Engadin proviene la famosa tarta de nuez. Si eres goloso, definitivamente deberías probar uno o dos trozos. Esta tarta es bastante densa y rica. Pero cada caloria merece la pena.
Después del desayuno, dejas Scuol y te diriges a St. Moritz. Tienes todo el día para explorar este elegante destino turístico. Aquí todo gira en torno a experiencias al aire libre. Tanto en verano como en invierno. Ya sea para andar en bicicleta, hacer senderismo, paddle surf, nadar, windsurf, esquiar, snowboard, hacer raquetas de nieve, esquí de fondo o simplemente dar un paseo. Aquí encontrarás todo lo que tu corazón desea.
A solo un corto trayecto de St. Moritz se encuentra el lago Silvaplana. Este es un lugar impresionante para realizar algunas de estas actividades.
Otro lugar que vale la pena visitar es Ospizio Bernina. Con 2253 m sobre el nivel del mar, esta pequeña estación es el punto más alto del tren panorámico Bernina Express. Los trenes salen cada hora desde St. Moritz y te llevan pasando por lagos, glaciares y majestuosas cumbres montañosas.
En cuanto a la gastronomía, además de la tarta de nueces del Engadina, te recomiendo otra cosa. Se trata de un plato de sopa de cebada de los Grisones. Esta sopa de cebada, verduras y carne es un plato típico de la región. Te calienta en un día fresco como nada más.
De regreso en St. Moritz, puedes pasar el resto del día paseando por la ciudad o relajándote junto al lago. St. Moritz no es tan encantador y místico como otros pueblos de la zona, como Samedan o La Punt. Pero es perfecto para ir de compras. Y si tienes suerte, quizás incluso veas a alguna que otra celebridad.
Hoy viajarás en el Glacier Express de St. Moritz a Zermatt. Este viaje en el "tren rápido más lento del mundo" es una experiencia única. A lo largo de todo el trayecto, estarás acompañado de las mejores vistas que los Alpes tienen para ofrecer.
El tren sale de St. Moritz dos veces al día en la mañana. El horario cambia a lo largo del año y hay algunos trenes que no recorren todo el trayecto entre St. Moritz y Zermatt. Para encontrar tu conexión, por favor consulta el horario actual con suficiente antelación.
Hay una razón por la que el Glacier Express es una de las rutas de tren más populares en Suiza. Lo que hace que este viaje sea tan inolvidable son las fantásticas vistas que te acompañan durante toda la travesía. El tren te lleva a través de 291 puentes, por 91 túneles, a través de tres cantones y dos regiones lingüísticas.
El viaje dura poco más de 8 horas y, dependiendo de cuándo salgas de St. Moritz, llegarás a Zermatt entre las 17:00 y las 18:00 horas. Una vez que llegues, puedes pasar el resto del día paseando por el pequeño pueblo de montaña y disfrutando de la vista de la majestuosa montaña Matterhorn.
Siempre y cuando no esté cubierto de nubes.
En Zermatt, al igual que en St. Moritz, el mundo montañoso y la naturaleza son el centro de atención. Si has venido a Suiza por las espectaculares vistas de las montañas, aquí te encantará. Numerosas excursiones y paseos de todos los niveles de dificultad te llevarán a lugares de los que ni siquiera sabías que existían.
Por suerte, hoy tienes todo el día para explorar este impresionante destino vacacional. Una visión completa de las actividades en y alrededor de Zermatt la encontrarás en el Día 2 de la Ruta de Viaje Nº 6.
Una vez que estés listo para dejar el aire fresco de la montaña, tomarás el tren de regreso a Zürich. Si vuelas desde Ginebra o planeas una visita a la segunda ciudad más grande de Suiza, también puedes dirigirte en esa dirección.
Aspectos destacados en esta ruta:
(Advertencia breve: Esta ruta de viaje está realmente llena y no recomiendo seguir un horario tan ajustado. Pero la ruta es factible en seis días completos. Así que si eres del tipo "tengo que ver lo más posible", podrás conquistar mucho con esta ruta.)
Explora Zúrich por la mañana a tu propio ritmo, alquila una bicicleta gratuita con «Züri rollt» o únete a un recorrido por la ciudad. Después del tour, consigue un almuerzo para llevar y viaja en tren a Schaffhausen.
Dirígete directamente a Neuhausen, al lado de Schaffhausen. La poderosa Cascada del Rin atrae a visitantes de todo el mundo y es una impresionante fuerza de la naturaleza. El acceso a las cataratas es gratuito desde la orilla norte, mientras que la visita desde el Castillo de Laufen al sur cuesta 5 CHF. Tómate el tiempo que necesites para disfrutar a fondo de la Cascada del Rin. Cuando estés listo, continúa hacia Schaffhausen.
Schaffhausen tiene un encantador casco antiguo. Aquí encontrarás 171 miradores, más que cualquier otra ciudad en Suiza. Cuando los hayas visitado todos y hayas explorado el resto de Schaffhausen, puedes subir al Munot y disfrutar de la vista sobre la ciudad.
Después del desayuno, empacas tus cosas y tomas el tren a San Galo. Tienes todo el día para explorar la ciudad y sus alrededores en toda su esplendor.
Con su distrito de la UNESCO, su imponente catedral y la impresionante biblioteca de la abadía, esta ciudad tiene mucho que ofrecer.
No debes perderte el área de recreo “Drei Weieren”. Puedes acceder a este lugar en el Mühleggbahn o a pie por una de las muchas escaleras. Alternativamente, también puedes visitar el parque natural Peter & Paul o saciar tu sed cultural en uno de los muchos museos.
El mejor lugar para relajarte es en los “Drei Weieren”. Aquí puedes nadar o dar un paseo por el bosque. Además, tienes una vista fantástica de toda la ciudad, del lago de Constanza e incluso hasta Alemania.
También el lago de Constanza, el país de Appenzell y la cadena montañosa Alpstein no están lejos de San Galo. Si deseas visitar alguno de estos lugares, tendrás tiempo suficiente por la tarde para hacerlo. Una lista detallada de actividades en Alpstein o en el lago de Constanza la puedes encontrar en el itinerario n.º 4.
Hoy tienes un largo camino por delante, así que sal de St. Gallen temprano en la mañana y sube al Voralpen-Express en dirección a Lucerna. El Voralpen-Express atraviesa paisajes muy pintorescos y tarda un poco más de dos horas en llegar a Lucerna.
De todos los viajes en tren panorámicos en Suiza, este es uno que es notablemente menos turístico. No hay grandes ventanales panorámicos ni una voz amigable que te indique qué viaducto estás cruzando.
Pero eso no hace que el viaje sea menos valioso.
Te recomiendo que interrumpas tu viaje a mitad de camino y bajes en Rapperswil. La ciudad es una joya oculta en la parte inferior del lago de Zúrich. Visita el castillo, pasa un tiempo con los ciervos en el jardín del castillo, nada en el lago de Zúrich y pasea por el idílico paseo marítimo.
Un excelente lugar para relajarse es el prado detrás de la OST, la universidad de tecnología en Rapperswil. No puedes perderlo si caminas desde la estación hacia el lago.
Si deseas hacer una caminata ligera, sigue el embarcadero de madera y el paso que conecta el lago hacia Pfäffikon. Durante esto, recorrerás tres kilómetros del Camino de Santiago, un camino de peregrinación que va desde diferentes lugares de Europa hasta Santiago de Compostela en España.
Cuando estés listo para continuar, toma el siguiente tren a Lucerna y pasa la tarde explorando la ciudad. Pasea por el puente de la capilla, deambula por el casco antiguo, disfruta del lago o visita el jardín glaciar con el famoso monumento del león.
Una lista detallada de actividades en Lucerna la encontrarás en el Día 2 del itinerario nº 3.
Por la tarde, viajarás en la Golden Pass Line, otra popular ruta de tren, hacia Interlaken. Conecta el centro de Suiza con la orilla del lago de Ginebra.
La ruta panorámica pasa por ocho lagos, atraviesa seis cantones diferentes, cruza tres pasos de montaña y conecta dos regiones lingüísticas. La etapa de hoy entre Lucerna e Interlaken está operada por la Zentralbahn y dura cerca de dos horas.
Pasa el resto del día en Interlaken, una ciudad popular y muy turística. Aquí hay innumerables actividades y si realmente deseas disfrutar de esta región, no será suficiente con una noche. Desafortunadamente, solo podrás tener una breve impresión de Interlaken, ya que mañana no tendrás tiempo para explorar el área. Sin embargo, debería haber suficiente tiempo para un paseo junto al Aare o una corta visita al Harder Kulm.
Hoy te espera otra delicia paisajística. Tan pronto como dejes Interlaken y te dirijas hacia Zweisimmen, tendrás el Lago de Thun a tu derecha. Para tener la mejor vista del lago, te recomiendo que consigas un asiento en el lado derecho del tren.
Si el tiempo lo permite y no te importa interrumpir tu viaje, puedes hacer una breve parada en Spiez. Con su castillo, un puñado de encantadores viñedos y acceso directo al Lago de Thun, Spiez merece una visita.
Cuando continúes tu viaje, tendrás que cambiar de tren en Zweisimmen. Allí comienza la subida a través de la Oberland bernés en dirección a Gstaad. Esta región es un verdadero sueño para los amantes de las montañas y reúne casi todo lo que Suiza tiene para ofrecer. Lagos, montañas, praderas verdes con vacas pastando, glaciares, una gran cantidad de senderos de montaña, paisajes maravillosos y pequeños y encantadores pueblos abundan en esta área.
Aún si no tienes suficiente tiempo para bajarte en el camino, el viaje a través de esta pintoresca zona es algo que probablemente no olvidarás pronto.
Después de dejar el Oberland bernés y haber bajado por las colinas, llegarás a la parte francófona de Suiza. Antes de continuar hacia Lausana, tendrás unas pocas horas para explorar Montreux.
Pasea por la orilla y mira la estatua de Freddie Mercury frente al mercado. Si deseas visitar el famoso Castillo de Chillon, puedes seguir la orilla hasta el castillo o tomar el autobús. También hay barcos de pasajeros que navegan regularmente entre Montreux y el Castillo de Chillon.
Alternativamente, puedes continuar directamente hacia Lausana, dejar tus maletas y visitar los famosos viñedos de Lavaux, que son Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Para disfrutar de las maravillosas vistas, baja en Cully o Epesses y sigue el sendero señalizado a través de las vides.
Pasa la mañana explorando aún más la ciudad de Lausana. La pintoresca ciudad vieja de Lausana está construida sobre tres colinas y está rodeada de numerosos viñedos. Alberga el Comité Olímpico Internacional y la única red de metro de Suiza.
Si ayer te hubiera gustado visitar los viñedos de Lavaux pero no tuviste tiempo, hoy tienes otra oportunidad para intentarlo.
A la hora del mediodía, dejas Lausana y viajas a Berna, la capital de Suiza. Tienes toda la tarde para explorar la ciudad antes de continuar hacia Basilea para pasar la noche. Pasea por la ciudad vieja, visita el parque de los osos, admira el edificio del Parlamento y regresa al Jardín de las Rosas para disfrutar de la vista.
También puedes visitar el Gurten, la montaña local de Berna, observar los animales en el zoológico de Dählhölzli o visitar el Jardín Botánico. Toma el ascensor en la estación de tren y disfruta de la vista en la Gran Terraza, o nada en el río Aare o en Weyermannshaus.
Aprovecha bien tu tiempo, ya que medio día no será suficiente para ver todo. Al final del día, puedes tomar el tren a Basilea y pasar la noche en la ciudad o a orillas del Rin.
Basilea es una ciudad vibrante situada directamente en la frontera entre Alemania y Francia. Aquí encontrarás varias visitas guiadas a diferentes horarios. Participa en un tour o explora la ciudad por tu cuenta.
Pasa por la Pfalz - la plataforma de observación perfecta para tomar algunas fotos postales - pasea a lo largo del Rin y observa los grandes barcos de carga que entran y salen del puerto. Pasa junto a la catedral o visita uno de los muchos museos.
Durante los cálidos meses de verano, puedes unirte a los locales y nadar en el Rin. Antes de saltar al agua y dejarse llevar por la corriente, ellos guardan su ropa en un 'Wickelfisch'. Esta bolsa de secado tiene la forma de un pez y es un símbolo de Basilea.
Alternativamente, puedes cruzar la frontera y visitar Weil am Rhein en Alemania o St. Louis en Francia. Teóricamente, incluso puedes visitar los tres países en un día. Suiza, Alemania y Francia. Esto es factible en Basilea y es algo que quizás no puedas experimentar todos los días. Especialmente si vienes de un país donde necesitas tomar un avión para llegar a la siguiente frontera en un tiempo razonable.
Cuando estés listo para dejar Basilea, regresa a Zúrich y pasa el resto del día explorando la ciudad más grande de Suiza.
¡Y felicitaciones! Acabas de completar, en mi opinión, el viaje más loco por Suiza. No creo que pudieras haber sacado más de tu tiempo aquí. Espero que lo hayas disfrutado.
Aspectos destacados de esta ruta:
Explora Zúrich por la mañana por tu cuenta, alquila una bicicleta gratuita con «Züri rollt» o únete a una visita guiada por la ciudad. Después del tour, compra un almuerzo para llevar y toma el tren hacia Engelberg.
Este versátil pueblo montañés se encuentra a unos 25 km al sur del lago de Lucerna, a una altitud de 1013 m sobre el nivel del mar. Con sus 3239 m sobre el nivel del mar, el imponente Titlis se eleva sobre las otras cumbres alrededor de Engelberg.
Dado que llegarás a Engelberg a media tarde o tarde, no tendrás tiempo suficiente para subir de inmediato. Así que dejemos eso para mañana, para que no estés estresado.
En su lugar, puedes explorar el centro de Engelberg esta tarde. O más concretamente, el monasterio benedictino. Este antiguo monasterio fue fundado en 1120 y todavía es habitado por unos 20 monjes. Puedes visitarlo por tu cuenta o unirte a una visita guiada.
Como muchos lugares en los Alpes suizos, Engelberg se centra en actividades al aire libre. El destino más popular en esta zona es sin duda el Titlis. Desde Engelberg, puedes alcanzar la cima en dos teleféricos. Uno de ellos es el Rotair, el primer teleférico del mundo que gira 360°. En la cima te espera una impresionante vista panorámica. Además, hay una espectacular cueva de glacier y el emocionante Titlis Cliff Walk de Tissot.
Las posibilidades de senderismo en Engelberg son prácticamente infinitas y ofrecen algo para todos los gustos. Una caminata recomendable es el llamado "Kitzelpfad" en Brunni. Aquí te quitas los zapatos y caminas sobre diferentes tipos de suelo. Y mientras tus pies son acariciados por la naturaleza, también puedes disfrutar de la vista perfecta del Titlis.
¿Y qué sería una verdadera caminata sin uno o dos lagos de montaña...?
Una caminata un poco más exigente llamada la ruta de los Cuatro Lagos te lleva a pasar por - como quizás ya lo has adivinado - cuatro lagos de montaña. Dado que esta caminata dura casi cinco horas, la recomiendo solo si te sientes lo suficientemente en forma.
Si deseas pasar un día menos agotador, puedes elegir el camino accesible para sillas de ruedas alrededor de Engelberg. Esta caminata de dos horas comienza en el monasterio en el centro de Engelberg y lleva hasta el pintoresco río Aa y de regreso. Aunque no subas a las cimas durante esta caminata, aún tendrás una hermosa vista de las montañas.
En invierno, Engelberg se convierte en un verdadero paraíso para los amantes de la nieve. Ya sea que te guste esquiar, hacer snowboard, caminatas con raquetas, senderismo, esquí de fondo, patinaje sobre hielo o trineo, podrás cumplir tus expectativas. Engelberg es especialmente popular entre los freeriders.
Esta mañana puedes hacer lo que no pudiste ayer por falta de tiempo. Luego, cuando estés listo, puedes ir a Lucerna. El viaje en tren de Engelberg a Lucerna dura menos de una hora y es muy sencillo. Una vez que llegues, puedes dejar tu equipaje en la estación y pasar un par de horas explorando esta encantadora ciudad. Pasea por el Puente de la Capilla, recorre el casco antiguo, relájate junto al lago o visita el Jardín Glaciar con el famoso monumento del león.
Tienes toda la tarde, así que tómate tu tiempo. Más ideas sobre qué hacer en Lucerna las encontrarás en la ruta de viaje número 2 en el día 5. Cuando hayas visto lo suficiente de Lucerna, sube al tren y dirígete a Solothurn. Esta ciudad también es conocida como la más hermosa del barroco de Suiza. Con su impresionante catedral barroca y sus muchas calles escondidas y bonitas, Solothurn merece este título más que de sobra.
Es probable que esta noche no tengas mucho tiempo para explorar Solothurn. Así que date un capricho esta noche con un par de bolas de helado en la Vitaminstation, una de las mejores heladerías que existen. Para comportarte como un local, puedes sentarte a comer el helado en el muro de piedra junto al Aare, el “Aaremüürli”.
Consejo de Seraina: Mis dos lugares favoritos en Solothurn son la Pittaria y la Vitaminstation. A cualquiera que le guste un buen falafel o hummus le encantará la Pittaria. Y la Vitaminstation hace, sin lugar a dudas, el mejor helado que he probado en Suiza. A precios increíblemente justos para los estándares suizos.
Aunque Solothurn no es una ciudad grande, hay mucho que ver y hacer en los alrededores. Una actividad que recomiendo especialmente es una caminata en el Jura. Esta meseta es un maravilloso destino durante todo el año.
Una forma de llegar al Jura, con sus innumerables senderos, es con el teleférico de Oberdorf al Weissenstein. Desde aquí, puedes caminar tanto y tan lejos como desees. El regreso puede hacerse a pie o nuevamente en teleférico.
Una excursión muy popular es la caminata circular de Solothurn por Balmberg y Weissenstein. Para ello, toma el autobús postal de Solothurn a Balmberg, camina a lo largo de la cresta hasta Weissenstein y baja en teleférico de regreso a Oberdorf. Desde Oberdorf, el tren te lleva de regreso a Solothurn.
Esta es una caminata fácil que te lleva al Jura sin un gran esfuerzo. Durante tu caminata, también podrás disfrutar de la vista de los Alpes, incluido el famoso trío de Eiger, Mönch y Jungfrau.
Otro lugar que puedes visitar es la Verenaschlucht. Para ello, pasea por el desfiladero a lo largo del arroyo Verenabach a través del bosque hasta llegar a la pequeña ermita al final. El paseo dura aproximadamente 45 minutos de ida y vuelta.
Alternativamente, también puedes navegar por el río Aare en dirección a Biel. Cuánto tiempo permanezcas en el barco depende completamente de tus planes. Todo el viaje a Biel dura aproximadamente 3 horas. Sin embargo, también puedes desembarcar en algún lugar en el camino y regresar a Solothurn en tren.
Uno de los aspectos destacados de este viaje es la mayor estación de cigüeñas de Suiza en Altreu. La alcanzarás después de aproximadamente 45 minutos en el barco. En 1950, cuando las cigüeñas estaban casi extintas en Suiza, Max Bloesch inició su proyecto de reintroducción para salvar a nuestras cigüeñas. Gracias a él, hoy puedes ver alrededor de 40 parejas reproductoras volar por el aire, pasear por los campos y picotear en los techos alrededor de Altreu.
Sin embargo, solo en primavera y verano. En otoño, migran a zonas más cálidas en el sur, hasta que termine el invierno.
Si continúas hacia Biel, la vista de las alturas del Jura y de la Suiza central te acompañará todo el tiempo. Después de pasar por una esclusa, llegarás al puerto de Biel, que está a solo un corto paseo de la estación de tren.
Desde allí, puedes tomar el tren de regreso a Solothurn en 15 minutos.
Si esta mañana necesitas disfrutar un poco más de Solothurn, puedes quedarte un poco más de tiempo. Tan pronto como estés listo, sube al tren y dirígete a Basilea. El trayecto en tren dura solo una hora.
Basilea es una ciudad vibrante situada justo en la frontera entre Alemania y Francia. Aquí encontrarás varias visitas guiadas a diferentes horarios. Participa en un tour o explora la ciudad por tu cuenta.
Haz una parada en la Pfalz: la plataforma de observación perfecta para tomar algunas fotos postales; pasea a lo largo del Rin y observa los grandes barcos de carga que entran y salen del puerto. Pasa por la catedral o visita uno de los muchos museos.
En los cálidos meses de verano, puedes unirte a los lugareños y nadar en el Rin. Antes de zambullirse en el agua y dejarse llevar por la corriente, guardan su ropa en un Wickelfisch. Este saco seco tiene forma de pez y es un ícono de Basilea.
Si hay algo que no pudiste ver ayer en Basilea, hoy es tu día. Pero si ya has visto suficiente de la ciudad, siempre puedes saltar la frontera y visitar Weil am Rhein en Alemania o Saint-Louis en Francia.
Teóricamente, incluso puedes visitar los tres países en un solo día. Suiza, Alemania y Francia. Eso es totalmente posible en Basilea y es algo que tal vez no puedas experimentar todos los días. Especialmente si vienes de un país donde tienes que tomar un avión para llegar a la próxima frontera en un tiempo razonable.
Cuando estés listo para dejar Basilea, regresa a Zúrich y pasa el resto del día explorando la ciudad más grande de Suiza. Si el tiempo lo permite, puedes terminar esta ruta visitando la fábrica de chocolate Lindt.
Cerca de Zúrich, en Kilchberg, encontrarás el nuevo centro de visitantes de Lindt, que abrió sus puertas al público en septiembre de 2020. Si nunca has probado un grano de cacao tostado, comido tantas bolitas Lindor como puedas o pasado un rato con la fuente de chocolate más alta del mundo, esta es tu oportunidad.
Y con esto concluimos nuestra colección de itinerarios de seis días para Suiza desde Zúrich. Esperamos que hayas encontrado algo de tu agrado y te deseamos mucha diversión al planear tu viaje.